EL PODER DE LOS PENSAMIENTOS

Los últimos estudios han demostrado que el ser humano tiene alrededor de 80,000 pensamientos diarios, si lo pensamos así resulta agotador solo darse cuenta de ello, lo anterior sin tomar en cuenta cuando se producen ataques de pensamientos. Ataques de pensamientos son aquellos que no dejamos ir y le damos vuelta y los pensamos y repensamos y regresamos a pensarlos de nuevo, de manera tal que nos dejan agotados. Lo más preocupante de ello es que estos ataques por lo general resultan de pensamientos que nos perturban, paradójicamente a las alegrías les damos menos pensamiento que a las preocupaciones o angustias.

En la medida que vivimos en el presente encontramos que tenemos menos pensamientos, ya que por lo general los pensamientos o son del pasado y generan culpas o cargos de conciencia, o son del futuro que generan ansiedad y miedos a lo incierto.

El número de pensamientos y la calidad de ellos dependen en la medida de cómo los analizamos o los vemos en forma objetiva, subjetiva, proactiva o resignados como verdades absolutas.  Resulta casi imposible ver un pensamiento en forma objetiva si no se hace un análisis profundo y con técnica. Por lo general los pensamientos son tomados e internalizados de acuerdo a todo el sistema mental que tenemos instalado y asumimos y prejuzgamos la mayoría de veces.

Aprender a darse el tiempo para analizar los pensamientos que más ocupan nuestra atención resulta muy valioso para poder identificar como pensamos y porque nos producen diversos sentimientos. Aprender a tratar nuestros sentimientos con objetividad es la clave para el mejor manejo de los pensamientos.

Dula busca  generar espacios para que te puedas tomar el tiempo de analizar tus pensamientos recurrentes, los que más te afectan y poder identificar los sentimientos que te generan, logrando con ello un mejor manejo de los mismos.

Haz un espacio en tu día, puede ser a primera hora al levantarte o al final del día o las veces que consideres necesario, busca un lugar para ti donde no hay interrupciones, respira profundo al menos unas cinco veces, trae a tu mente ese pensamiento y analiza donde lo sientes, qué sientes y si puedes cambiar algo sobre el mismo, por ejemplo tu actitud, tu involucramiento en él o tu falta de interés sobre el mismo. Después del análisis determina si vale la pena dedicarle toda esa energía que te consume o no. Según la decisión que tomes actúa y verás como ese pensamiento evoluciona en algo que te agradará o te dará mejores resultados.

Recuerda el cambio siempre empieza por ti, a lo interno, en Dula nos proponemos todo tipo de técnicas para llevar a cabo estos ejercicios con éxito, vale la pena intentarlo.